Decenas de civiles han resultado muertos o heridos desde que comenzaron a intensificarse las hostilidades, el 14 de noviembre. Numerosos bienes y viviendas civiles han sido afectados. Conforme al derecho internacional humanitario, estos lugares deben ser preservados durante los enfrentamientos.
"En el este de Guta, la situación humanitaria ha alcanzado un punto crítico. Como viene ocurriendo en Siria a lo largo de los últimos seis años, la población civil vuelve a quedar atrapada en una situación en la que la vida poco a poco se vuelve imposible y los bienes y la ayuda se ven gravemente limitados", dijo el director de Actividades Operacionales para Oriente Medio del CICR, Robert Mardini.
Además, el personal médico que está sobre el terreno ha informado que centenares de heridos y enfermos no reciben la atención médica vital que necesitan. Las bajas temperaturas amenazan con deteriorar aún más la situación. Dado que ya casi no hay combustible, la población tiene muy poco acceso a medios de calefacción aptos, por lo que corre mayores riesgos de salud.
"Las personas que padecen enfermedades crónicas y lesiones graves apenas logran acceder a la atención médica. Los heridos y los enfermos no deben ser usados como instrumentos de negociación entre las diferentes partes involucradas en los enfrentamientos. Es imperioso brindar atención médica a las personas que la necesiten, independientemente de quiénes sean", añadió el señor Mardini.
La población civil del este de Guta también sufre una preocupante escasez de alimentos, cuyos precios han aumentado enormemente.
"Algunas familias solo pueden comer una comida al día, lo que es particularmente triste en el caso de las que tienen niños. Por ello, la mayoría de las personas dependen casi por completo de la ayuda de las organizaciones humanitarias", explicó el señor Mardini.
"Todas las partes beligerantes deben alcanzar una solución que dé prioridad a los civiles y que permita que la ayuda humanitaria llegue a la población en forma regular. Ninguna ventaja militar o política podría justificar este enorme sufrimiento, ni en el este de Guta ni en cualquier otra parte de Siria."
Para más información:
Ingy Sedky, CICR, Damasco, +963 930 336 718
Iolanda Jaquemet, CICR, Ginebra, +41 79 447 37 26